Pues siendo imposible

sé que las cosas no se perciben de azul.

Puedo quedarme bien quietecita

y esperar que no pase todo

y siempre se quede sucediendo

lo de siempre, lo de nada.

Creo que hay que plantar bien

los pies en el cielo,

abrir la mente y echarse a volar

a la India o a algún lugar

donde se prospere en la magia

misma del ente que visita.

Pienso también

que es importantísimo

seguir el desplan

y rodear la tierra atravesando el mar.

No sé bien si llegue a algún lado

pero puedo estar más que segura

de que fui feliz

haciendo y siguiendo a mi corazón.