miércoles, 9 de julio de 2008

Tarareando tu cuerpo

Tu lengua dulcísima de uvas
en almíbar de duraznos
enredada en mis sentidos
y tu saliva siendo néctar
o alguna miel robada
de un mutilamiento a los
manjares más exquisitos
en la entre sala de mis te a-mo-s
extasiada en el fino y deleitable
roce de mi piel entre tus dedos,
tus dedos que rociaban de poesía
y tus labios que me mordían
a la altura de mi pecho
descubierto a tu paladar.
Las yemas de tus dedos
me succionan las ternuras
comprimidas en gemidos
que por lo general suelen presentarse
largos y callados
mientras te paseas al amor por mis caderas.
Y tus pupilas gigantes me arrastran,
me liberan, me agrandan, me inspiran
y nos ligan al mundo donde nadie habita,
al mundo donde sólo existe un 'somos'.
Reencuentro con el deseo de
saborear la piel que una vez más
te gritó
co-
me-
me.
Así este fascinante delirio de ir
por mis memorias tarareando tu cuerpo.

3 comentarios:

El Amo dijo...

Un tiempo ausente pero e vuelto, un saludo antes que nada y cada vez mejoras más, sigue escribiendo, me gusto este en especial.

karee boop dijo...

i like itttttttttt

M a r c o dijo...

algo cursi no?